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Una guía para el Mantenimiento Preventivo de una Zaranda Móvil

Una guía para el Mantenimiento Preventivo de una Zaranda Móvil

En COMECO, entendemos que la inversión en una zaranda móvil como la Terex Finlay 683, 684, 693 y 694 es significativa. Para proteger esa inversión, maximizar su tiempo de actividad (uptime) y asegurar su valor de reventa, el mantenimiento preventivo no es una opción, es una obligación.

Un programa de mantenimiento bien ejecutado no solo previene averías costosas, sino que también garantiza que su máquina opere con la máxima eficiencia posible, separando el material con precisión jornada tras jornada.

A continuación, desglosamos tres áreas clave de atención, basadas en la experiencia técnica y el manual de operaciones de estos equipos.

1. El Pilar de la Longevidad: Puntos de Lubricación Críticos

La lubricación es la sangre vital de cualquier equipo de trituración y cribado. Sin embargo, no todos los puntos de engrase son iguales, ni requieren la misma atención. En las zarandas móviles, hay dos áreas que demandan una frecuencia y calidad excepcionales:

Criba y Chumaceras

Los rodamientos de la caja de cribado y las chumaceras soportan cargas de impacto y vibración constantes. Si estos fallan, el tiempo de inactividad es prolongado y la reparación, costosa.

  • Frecuencia Estricta: Cada 50 Horas.
    • Para estas áreas críticas, el manual recomienda una lubricación obligatoria cada 50 horas de funcionamiento.
  • Grasa Especializada:
    • No use cualquier grasa. Elija siempre un lubricante de alta calidad y de Litio EP2, diseñado para soportar las altas presiones y vibraciones que experimentan estos rodamientos. La grasa debe ser capaz de mantener su viscosidad y proteger contra el óxido y el desgaste abrasivo.

Articulaciones y Juntas

Los pasadores de articulación, las juntas cardán y los cojinetes de los cilindros hidráulicos también necesitan atención, aunque con menor frecuencia. Estas áreas garantizan la movilidad y el ajuste de los transportadores.

  • Frecuencia: Cada 100 Horas.
    • Una lubricación en estos puntos cada 100 horas con una grasa de uso general de calidad ayudará a prevenir la corrosión y el chirrido.

2. El Chequeo Diario: La Salud del Motor Diésel

El motor diésel es el corazón de su zaranda móvil. Los chequeos diarios son un hábito de 5 minutos que pueden salvarlo de una avería que dure 5 días.

  • Niveles Esenciales:
    • Aceite del motor y refrigerante: Compruebe estos niveles a diario, siempre con el motor apagado y en frío, y rellene según sea necesario.
    • Nivel de Combustible y Aceite Hidráulico: Asegúrese de que el depósito de combustible y el depósito hidráulico tienen el nivel correcto para la jornada.
  • Sistema Hidráulico:
    • Inspección visual: Verifique si hay fugas visibles en mangueras, conexiones y cilindros hidráulicos.
  • Mantenimiento Programado de Fluidos y Filtros:
    • Cada 250 horas: Sustitución obligatoria de filtros de aceite de motor y filtros de combustible.
    • Cada 500 horas: Si opta por realizar un análisis de aceite regular, puede extender este intervalo, pero la sustitución de filtros sigue siendo crucial.

3. La Vitalidad de la Banda: Inspección y Tensión de las Cintas Transportadoras

Las cintas transportadoras son responsables de mover miles de toneladas de material. Mantenerlas en buen estado es fundamental para un flujo constante.

  • Revisión de Desgaste y Daño:
    • Inspeccione diariamente las cintas en busca de cortes, desgarros o signos de desgaste irregular. Una cinta dañada puede romperse bajo carga.
  • La Tensión Correcta:
    • La tensión de las cintas es clave. Si están demasiado sueltas, patinan, causando un desgaste acelerado de las poleas y la propia cinta. Si están demasiado tensas, someten a los rodamientos a una presión innecesaria.
    • Alineación en Funcionamiento: A diferencia de muchas otras reparaciones, el manual permite ajustar el alineamiento de los rodillos tensores mientras la máquina está funcionando. Esto facilita el trabajo: revise el recorrido de la cinta y ajuste los tambores motrices y de cola hasta que la cinta se centre en la estructura.

Prevención = Rentabilidad

En COMECO, entendemos que la verdadera productividad no solo depende del equipo, sino del acompañamiento técnico y la prevención constante. Por eso, te asesoramos de principio a fin: desde la elección de la zaranda ideal hasta el mantenimiento que garantiza su máximo rendimiento.

Nuestro compromiso es simple: que tu máquina nunca se detenga. Con soporte postventa, amplio stock de repuestos y consumibles en Perú y Chile, y capacitación operativa para tu equipo, aseguramos que cada hora de trabajo se traduzca en rentabilidad.

Porque en COMECO no solo vendemos equipos; impulsamos operaciones eficientes, seguras y sostenibles. Con nuestra experiencia, tu producción está lista para alcanzar el siguiente nivel.

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